CRONICA: Silvio Rodriguez en Lima – Explanada Sur del Monumental – 19 de abril 2013

Por Jose Carlos Ugaz (@MorenoUgaz)
Un espectáculo lleno de romanticismo y sentimiento fue el que se vivió la noche del 19 de abril en el concierto de Silvio Rodríguez. Un retorno al Perú después de años desde su última presentación en el Jockey Club del Perú.

En esta oportunidad pudimos ver a una explanada Sur del Estadio Monumental mucho más cercana, con una menor distancia entre zonas que hacía sentir el concierto como una velada privada en donde también se notó el incremento de los fanáticos del trovador cubano.
Silvio Rodríguez en Lima fue un concierto romántico de principio a fin, en donde el público logró conectarse con el cantautor cubano transmitiéndole su cariño y él devolviendo ese gesto con canciones que tocaban el corazón de cada uno de sus fanáticos.
El espectáculo dio inicio poco más de las 8pm con la presentación de la agrupación nacional Silvio a la Carta, grupo que realiza covers del artista con instrumentos nacionales y viene haciendo esta labor desde hace más de 15 años. En esta ocasión la agrupación decidió tocar canciones propias seguramente inspiradas en la poesía de Silvio Rodríguez.
El público seguía llegando al concierto. Se podía apreciar varias zonas con una cantidad bastante considerable de las localidades que se habilitaron para el concierto. El público esperaba ver a Silvio con muchas ansias, la cual se notó cuando a las 8:45pm ingresó el Trío Trovarroco a manera de introducción quienes de inmediato recibieron el aplauso y buenas vibras de la multitud. Pocos minutos después hizo su entrada el poeta Silvio con su particular sombrero, una chaqueta y un polo negro con la bandera de Cuba. “Buenas noches Lima. Después de 5 años gracias a ustedes por prestarnos atención”, fueron sus primeras palabras dirigidas al público. La explanada expresó su alegría total de recibir al cantante el cual inició esta velada con la canción Segunda Cita, uno de sus principales singles de su último disco del mismo nombre.
Para mí era también una segunda cita con el trovador, el cual tuve la oportunidad de ver por primera vez en 2007. La voz de Silvio está intacta y escucharlo era transportarme a momentos de tranquilidad y alegría. La música de Silvio tiene la característica de seguir estando vigente en varias generaciones por hablar de motivaciones, felicidad, justicia, libertad, revolución, paz y otros temas que conmueven a todas las generaciones.
Silvio se dirigió al público por primera vez como preámbulo a entonar San Petersburgo cuando nos contó la historia de esta canción que se remota a una oportunidad en que se encontró con Gabriel García Márquez en un avión mientras se dirigían en México. Como el avión se encontraba medio vacío se pusieron a conversar. Allí el escritor colombiano le contaba acerca de unos cuentos cortos que tenía los cuales no sabía si eran cuentos o novelas, quizás canciones, pero como Gabo no es cantante, esto se perdía. Silvio tomó una de estas historias y compuso San Petersburgo en donde la novia de ojos azules Elena es abandonada el día de su boda en las frías y lejanas tierras de Rusia.
En la primera parte del concierto Silvio nos encantó con 9 canciones para dar paso a un pequeño break en donde el Trío Trovarroco tocó Chan Chan de manera instrumental homenajeando a Compay Segundo.
Silvio volvió al escenario para cantar Mujeres de una manera distinta a la original pero con la misma genialidad de siempre. Asimismo, tocó canciones muy pedidas por el público como Sinuhé, Cita con ángeles y Mariposas. Pudimos ver a un Silvio más tranquilo e interactuando con el público limeño dejando de lado su conocida timidez al invitarnos a cantar una frase de la canción Cita con Ángeles: “seamos útil y mejores y mucho menos egoístas”.
Otro de los momentos más lindos del concierto fue cuando Silvio empezó a hablar como un niño mientras cantaba Escaramujo y nos recordaba esas preguntas que lanzan los niños de una forma inocente y sin mala intención por el solo hecho de saber: ¿por qué la tierra es mi casa? ¿por qué la noche es oscura?
El clímax llegaría cuando Silvio se paró de su asiento e inició: “Ojalá que las hojas no te toquen el pelo cuando caigan”. El público se paró de sus asientos y fueron corriendo cerca del escenario para poder acercarse a su artista en este momento mágico. Y fue así, la multitud reunida, todos juntos cantando una de las canciones más emblemáticas del trovador definitivamente, en un ambiente lleno de alegría. Yo también me sentí de la misma manera quizás recordando tantos cassettes de Silvio que mi papá escuchaba en su carro mientras me llevaba al colegio. Todos esos momentos y recuerdos estaban ahí en frente mío y siento que fue así también para la mayoría de los que coreamos de principio a fin esta canción.
Al final de la canción Silvio y su banda procedió a retirarse despidiéndose de la multitud, la cual incluyéndome no queríamos de ninguna manera que el concierto termine. La multitud empezó a gritar “Olé olé olé olé Silvio Silvio”. El cantante volvió a salir al escenario en compañía de nada más que de su guitarra. Aquí, a mi parecer empezó con el momento más íntimo de la noche, cuando cantó Playa Girón, Unicornio y Pequeña Serenata Diurna teniendo a un público que se comportó a la altura de la situación y no dejaron de corear sus canciones agradeciéndole a Silvio por esta noche.
Silvio vuelve a pararse de su asiento y realiza su segunda desaparición del escenario trayendo consigo más arengas del público con mucha más intensidad. La agrupación y el cantante vuelven al escenario y se disponen a seguir deleitándonos con su música. Los fanáticos queríamos escuchar todas las canciones que pudiéramos. Silvio utilizó su fúsil (guitarra) para hablarnos una vez más de política cuando tocó Tonada del Albedrío, una canción dedicada al Che Guevara y posteriormente vino uno de los momentos que más se recordará del concierto cuando el cantante dedicó El Necio al nuevo presidente de Venezuela Nicolás Maduro. Sabíamos que el concierto estaba terminando y queríamos que Silvio pudiera tocar alguno de nuestros pedidos, los cuales complació cuando tocó Sueño con Serpientes y para redondear una noche mágica con Ángel para un final, cerrando un concierto que quedará en la memoria de todos los que asistimos con un sencillo y emotivo: “¡Gracias Perú!” con el que Silvio se despedía del escenario por tercera y última vez.
Eran casi las 11:28pm y a pesar de que los gritos de la fanaticada no cesaban Silvio no volvería a aparecer en el escenario dejando a un público muy feliz después de más de 2 horas y media de concierto en donde combinó canciones de su último disco con las más reconocidas y emblemáticas con lo cual dejó una sensación de felicidad, un feeling especial por el concierto y con las ganas de que vuelva muy pronto.
Sin duda alguna se nota que la trova nunca pasará de moda, en donde esta conjunción de letras y música hermosa hace que la música de Silvio puede tocar en las fibras más sensibles de cualquier persona. A mi parecer, este concierto ha sido uno de los más emotivos del año en donde Silvio fue el ángel que nos robó la voz.
Ahora los dejamos con el set list y un video de la noche:
1. Introducción instrumental
2. Segunda cita
3. Días y flores
4. San Petersburgo
5. Carta a Violeta Parra
6. El Mayor
7. Canción del elegido
8. Virgen de occidente
9. Quién fuera
10. Chan Chan
11. Mujeres
12. De la Ausencia y de Ti, Velia
13. La maza
14. Escaramujo
15. Sinuhé
16. Cita con ángeles
17. Mariposas
18. La era está pariendo un corazón
19. Te doy una canción
20. Ojalá
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21. Playa Girón
22. Unicornio
23. Pequeña serenata diurna
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24. Tonada del albedrío
25. El necio
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26. Sueño con serpientes
27. Ángel para un final