En pleno cambio de milenio apareció en Lima la que sería para muchos la banda más influyente del indie pop en Perú. Les bastó con un solo disco para dejar una huella que hasta el día de hoy suena innovadora, desafiante y cargada de melodías convertidas en himnos generacionales. Estamos hablando de Electro-Z y su disco homónimo de 1999.